No escribo poemas y sin embargo acá estoy...
Un día voy y al otro me voy, ya ni sé pero a veces hay que jugar.
I
No te enamores de mí, ni de mis silencios
no prestes atención a mis sonrisas
ni a mis trucos.
No queda ninguna sensualidad escondida
ni ningún hechizo por hacer.
Con mi sencillez vestida de algodón
No te pido más de lo que podés dar
Ay!, por favor
no me pidas más de lo que soy!
II
Brujos son sus fonemas
y sus ansías de revolución,
su ausencia de lujo,
su plenitud guerrillera.
Hechizan,
por un instante,
como flautista mágico
o quizá, simplemente,
como él mismo.
Tan sólo él ante mí
Cuánta belleza!
y yo, que sólo me animo a mirar
desde lejos,
lo que no puedo tocar.
III
Pasitos miedosos
desnudez escondida
No podés enamorarte de mí
no me atrevo a enamorarme de vos
y ya nos ves
aquí los dos
desoyendo al tiempo
y al destino.
Jugando con fuego.
Fingiendo ser mucho más que dos.
Hasta aqui.
Hasta hoy.
- Y mañana? - me dirán.
- Pues, mañana ya no sé.-
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario